La oxigenación con blowers es un paso importante en el proceso de tratamiento y depuración de aguas residuales. Este proceso de añadir aire en aguas residuales permite la biodegradación aeróbica de los componentes contaminantes. A diferencia del tratamiento químico, el tratamiento biológico utiliza microorganismos que moran naturalmente en las aguas residuales para degradar contaminantes de las aguas residuales.
Los microorganismos anaerobios son los principales causantes del mal olor de las aguas estancadas. Por lo tanto, evitar su sedimentación y formación es uno de los aspectos más importantes en el tratamiento de aguas residuales. Los equipos que permiten la oxigenación y mezclado de las aguas residuales son los blowers o sopladores. Estos equipos son clave para mantener oxigenada y mezclada el agua residual. Su función es permitir optimizar la superficie de aireación deseada.
En el caso de su aplicación en plantas de tratamiento de aguas residuales, es importante su aplicación de los tanques digestores. Las plantas de tratamiento de aguas residuales, debido a su naturaleza, se activan con oxígeno por medio de aire comprimido, ya no con blowers. Una mezcla exhaustiva del lodo con oxígeno aumenta el rendimiento del gas y reduce su tiempo de retención en el tanque. Además se obtienen resultados incluso mejores con aire comprimido caliente.
Por su parte, para la eliminación de aguas residuales, se pueden aplicar sistemas de vacío central, llevando a cabo la eliminación de aguas residuales en el mismo lugar. Además, estas aguas residuales puede transportarse cuesta arriba, con el uso de vacío.
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